No hay duda de que las tabletas y los teléfonos inteligentes son una parte presente y creciente de nuestra vida cotidiana. Si usted es padre o madre de preadolescentes o de adolescentes, es probable que el uso que hacen de la tecnología y las redes sociales sea una de sus principales preocupaciones. Lo veo todos los días en mi consulta.
Según la Academia Estadounidense de Pediatría, alrededor del 18 por ciento de los niños de 8 a 12 años utilizan redes sociales, y el 62 por ciento de los niños de 13 a 18 años hacen lo mismo. Entre los adolescentes y los adultos jóvenes, ese número aumenta al 90 %.
Las Redes Sociales y la Salud Mental
A medida que las aplicaciones de redes sociales como TikTok e Instagram ganan popularidad entre nuestros hijos, su relación con la salud mental pasa a primer plano. Un estudio de 2019 publicado en la revista JAMA Psychiatry halló que los niños que pasan más de 3 horas al día en las redes sociales tienen un mayor riesgo de sufrir problemas de salud mental. Además, una encuesta de 2018 del Pew Research Center reveló que el 59% de los adolescentes estadounidenses han sufrido intimidación o acoso en línea.
Teniendo en cuenta que las tasas de problemas de salud mental ya son elevadas entre los niños, estos factores de estrés añadidos pueden ser bastante preocupantes para los padres. Los datos del National Center for Health Research indicaron que el 13 por ciento de los niños de 12 a 17 años informan depresión, y el 32 por ciento del mismo grupo de edad informan problemas con la ansiedad.
Un Enfoque Inteligente Hacia las Redes Sociales
Por supuesto, si tiene un hijo preadolescente o adolescente en casa, sabrá que prohibir completamente el uso de estas aplicaciones no será la solución en la mayoría de los casos. Sin embargo, puede ser útil retrasarlo todo lo que pueda, hasta que sus hijos sean más maduros mentalmente. Recientemente, el Cirujano General de los EE. UU. dijo que cree que los niños de 13 años son demasiado jóvenes para muchas plataformas de redes sociales.
Cuando decide permitir que los niños participen en las redes sociales, lo mejor suele ser establecer normas y pautas claras, y hacerlos responsables si no las respetan. Por ejemplo, antes de darles permiso a sus hijos para que usen TikTok, YouTube, Instagram u otras plataformas de redes sociales, Nemours KidsHealth recomienda mantener una conversación con ellos para establecer las normas y explicarles las implicaciones de las redes sociales si no publican de forma responsable. Esa conversación puede incluir pautas como las siguientes:
- Ser siempre amable.
- Pensar dos veces antes de publicar.
- No hacerse amigos de extraños.
- Pensar en lo que querrían que vieran los demás antes de publicar algo.
- Incluir en su red a sus padres y cuidadores.
- Limitar el uso a una cantidad razonable de tiempo cada día.
Nemours también recomienda revisar la configuración de privacidad con su hijo para asegurarse de que solo comparta información con quien quiere compartirla. Por último, los padres pueden plantearse crear un contrato en torno a estas normas con sus hijos, y debería haber consecuencias si no se cumplen.
Utilizar las Redes Sociales para hacer el Bien
Las redes sociales en la adolescencia no son del todo malas. Entre otras cosas, les ayuda a mantenerse conectados entre sí y con el mundo, a aprender sobre nuevos temas, a potenciar su creatividad y a descubrir oportunidades de voluntariado. El Child Mind Institute señala que los embarazos adolescentes, el consumo de alcohol y drogas ilícitas y los accidentes de tránsito han disminuido en la era del aumento del uso de las redes sociales.
La clave, por supuesto, es establecer normas y pautas claras para garantizar que su hijo use las redes sociales de forma segura, saludable y productiva. Esto puede permitir que estas aplicaciones sean una herramienta útil o una diversión, en lugar de una adicción que afecta negativamente su salud mental.